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Outstanding Kelp
Outstanding Kelp
Kanji アウトスタンディング ケルプ
Romaji Autosutandingu Kerupu
Número 5
Saga Saga de la Guerra contra Hueco Mundo
Cronología
Anterior The Alliance Tree
Siguiente Roots Never Die
Personajes
Alana FurukawaAlessia ValentiDaniele DanielleDante LiggieriEnricco DescartesGiacomo FerranteGiovann BattistaIchiei FurukawaKagura NōKorren SeptimusMassimo CreatoreMiyukiRingo Blazze


Outstanding Kelp (アウトスタンディング ケルプ, Autosutandingu Kerupu; traducido al español como Alga Excepcional) es el quinto capítulo de la Saga de la Guerra contra Hueco Mundo.

Sinopsis[]

No hago nada más que molestar, o al menos eso es lo que dicen ambos miembros de mi Fracción, Larrs y Korren. Soy un simple niño, la única razón por la que no me he levantado de mi cama es porque si me levanto Korren me dirá que mi hora de salir de la habitación es hasta dentro de una hora.

Lo veo recostado contra la pared, durmiendo. Una de las órdenes de Ringo-kun cuando me reclutó era que tenía que dormir siempre con algún miembro de mi fracción en mi habitación, eso y que ellos siempre tenían que vigilarme, era algo así como que yo era muy molesto, aunque sé que para Ringo-kun soy uno de sus soldados más fuertes.

Creo que ya Korren está despierto, es hora de empezar el día.

Giacomo: ¡KORREN!

Korren: No grites...

Giacomo: ¿Por qué? No veo nada malo.

Korren: Lo digo porque es molesto, Giacomo-sama.

Para Korren todo lo que hago es molesto, en realidad para Larrs igual, ambos tienen que estar detrás mío todo el tiempo para que yo no haga alguna locura. Es decir, la última vez que me les escapé, destruí toda la parte norte del Palacio... no fue algo bonito lo que sucedió después.

Salí de la habitación y a la primera persona que veo es a Alessia Valenti, ella sigue comportándose como mi madre, aunque yo bien sé que no lo es, pero no quiero decepcionarla, ha sido buena conmigo desde que llegué aquí, a diferencia del resto de los Espada. Alessia me ha dado su cariño, su amor... una palabra muy rara para un Arrancar. He de decir, que quiero a Alessia como si fuera mi madre... aunque no lo sea.

Giacomo: ¡OKKASAN!

Me lancé sobre ella. Como siempre me abrazó y me besó la frente, sentí su cariño, seguido de eso me lanzó fuertemente sobre Korren.

Alessia: Maldición Korren, si Ringo-sama vuelve a ver a Giacomo en la entrada de su habitación no morirá él, sino tú. Ten cuidado la próxima vez.

Korren: Sí, Alessia-sama.

Giacomo: ¡Korren! Busca a Melissa Gio y dile que quiero mis dulces.

Korren: P-pero, Giacomo-sama, no lo puedo dejar solo.

Giacomo: No estoy solo, estoy con Okkasan

Alessia: Ve Korren, o hará una pataleta... y la última que hizo fue un desastre...

La verdad era que únicamente quería quedarme un rato con Okkasan, Korren y Larrs siempre están sobre mí, inclusive cuando estamos en las Reuniones de los Espada, alguno de ellos tiene que estar conmigo, porque todos los debiluchos esos que están debajo de mí se quejaron de que soy un insolente cuando me levanto y me voy. ¡Si me voy es porque tengo ganas de ir al baño!... y porque las reuniones son aburridas...

Es decir... hasta el momento no entiendo porque soy un Espada... soy sólo un niño, tengo una memoria pésima, me tienen que repetir las órdenes 7 veces para poder entenderlas, y todavía planean que ponga atención en esas tontas reuniones.

Pero bueno... no me queda nada más que seguir lo que Ringo-kun dice. La verdad es que el tiempo que paso en este palacio es genial, todos hacen lo que yo les pida aún cuando están de mal humor... empiezo a tener hambre...

Giacomo: Donde demonios estará Korren... quiero mis dulces...

Alessia: Ten paciencia, sabes que tiene que ir a interrumpir a Enricco, y él odia que lo interrumpan.

Giacomo: Eso no me quita las ganas de--- ¡¡TOUCHAN!!

Corrí hacia Touchan. Daniele Danielle, es una de las dos personas en las que puedo confiar en mi estadía en este lugar. Le tengo bastante aprecio, aunque siempre es el que me castiga cuando destruyo algo... Pero no me queda de otra.

Daniele: No corras por el pasillo, Giacomo.

Giacomo: Perdón... ¿Jugamos a quien es el más fuerte?

Daniele: No puedo Giacomo, me encargaron vigilar una de las puertas el día de hoy - La mirada de Touchan rapidamente se volvió hacia Okkasan -. Tengo entendido que Enricco dio un reporte de que 7 reiatsus sumamente poderosos entraron a Hueco Mundo, por lo que Ringo-sama quiere tener suma precaución. Te toca vigilar la puerta Norte, mi amada Alessia.

Alessia: Supongo que a tí te toca la sur, a Dante la este y a Sophie la oeste.

Daniele: No - Las palabras de Touchan no provocaron más que Okkasan abriera sus ojos ante tal sorpresa. -. Esta vez Sophie no fue solicitada... Giacomo sí, y le corresponde la puerta Sur.

Giacomo: ¿Qué yo qué?

Extraño que me tocara vigilar algo... es decir... usualmente envían a Sophie porque yo soy un irresponsable, que no logra poner atención a nada... supongo que Ringo-kun quiere ponerme a prueba esta vez.

Giacomo: Supongo que Larrs y Korren deben acompañarme...

Daniele: Supones bien.

Bah... si ese par de ineptos tienen que vigilarme no tiene gracia alguna. Pero no queda más que vigilar.

11 horas después

Tengo entendido que los Shinigami de nivel de Capitán son sumamente poderosos... pero estos no hicieron más que darme vergüenza. Es decir... golpeé a uno con mi fuerza mínima y terminó noqueado... ¿cual es la gracia de una pelea así? Pero bueno... Ringo-kun dijo que estuve espectacular y que seguirá encargándome el cuido de alguna puerta. ¡Es genial! ¡Ringo-kun ya confía en mí!

12 horas después

Misma rutina de siempre... esta noche le correspondía a Larrs vigilarme, por lo que cuando me desperté no le grité. Nada más le dije que ya era hora de salir. Parece que lo sorprendí, me dijo que cambié, puesto que no le grité o me le lancé encima como hago todo el tiempo. Es extraño, estoy seguro que nunca hice eso. O puede que sí...

Esa mañana vi a Okkasan, la saludé, le di un abrazo normal, y seguí caminando. Siento que algo cambió en mí esta mañana... algo que me está sucediendo... será la... ¿pubertad?

Giacomo: ¡¡NO!!

He de ser sincero corrí tan rápido que el pobre Larrs no pudo seguirme el paso. Llegué al laboratorio de Enricco, y lo interrumpí en su disección del cuerpo del Shinigami ese, le dije que me dijera si estaba en la pubertad.

Enricco: No puedo creer que me interrumpieras por esto... los Arrancar no envejecemos, nos mantenemos en esta forma durante toda la eternidad hasta que fallezcamos. Así que no, no estás en la pubertad. Ahora vete...

Melissa apareció y me dio un dulce. Me encantan estos dulces, siempre tienen sabores distintos, esta vez sabía a durazno. Caminé por donde vine, y me encontré a Larrs en medio pasillo... me amarró a una silla durante el resto del día hasta que Ringo-kun llamó a una reunión... otra aburrida y melodramática reunión en donde los Arrancar somos las víctimas... si no atacáramos a la gente que no hace nada no seríamos víctimas de nadie...

Pues llegué a la reunión... y aunque esta vez no presté atención a casi nada. Me pareció interesante cuando Jiovanna Cavazza interrumpió la reunión. Un reporte sobre un gato y 3 Shinigami que se dirigían hacia el palacio de las Noches, indicando que los 3 presentaban un reiatsu igual que el de un Capitán.

Ringo: Alessia, Giacomo, Dante, Daniele, a las mismas posiciones de ayer. Massimo, tu acompañarás a Giacomo esta vez.

Alessia, Dante, Daniele y Massimo: Sí, Ringo-sama

Giacomo: Está bien, Ringo-kun...

Nunca había hecho equipo con Massimo, de hecho casi nunca había hablado con él... pero bueno esta vez me tocó trabajar con él...

Cuando llegamos a la puerta Sur, había 2 figuras humanoides peleando contra los Adjuchas de la puerta. Los adjuchas simplemente no podían contra ellos, cuando nos percatamos, una tercera figura apareció y aplastó a los adjuchas en un instante, dejando una gran cortina de humo.

Giacomo: Beta #35: Escritura

Esta Fórmula enviaba una señal a todos, indicando la puerta donde se encontraban los intrusos. Fueron cuestión de segundos cuando Dante y Giovann aparecieron al lado mío y de Massimo.

Una vez disipada la cortina de humo, únicamente había 3 Shinigami y una gata. Una tierna gatita... quería correr hacia ella, pero era obvio que no podía, algo me decía que era sumamente ti... peligrosa... sí... peligrosa...

Dante: Quiero descuartizar a la gata... nunca antes había visto un gato que presentara tanto reiatsu...

Massimo: No te confíes Dante, uno de mis reportes me dijo que la Capitana Comandante no era humana.

Dante: ¿Y qué? Yo la---

Sí, está bien... soy débil, muy débil.

Giacomo: Eres una linda gatita. Vamos, te enseñaré todo el palacio.

Gata: Gracias, niño lindo.

Desaparecí, lo que hiciera el resto no me importa en este momento. ¡Tengo una gata de mascota!

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